La multiplicación, desde la perspectiva de la aritmética, tengamos en cuenta que también posee un concepto geométrico, es la operatoria mediante la cual obtenemos una cantidad que contiene un número de veces a otro número dado. En definitiva, es otra manera de componer y descomponer números.
Para introducirla, y a la vez trabajar de manera lúdica y operativa las “Tablas de multiplicar” debemos apoyarnos en un material manipulativo muy rico para que el alumnado lo experimente: bien puede ser un cartón de huevos de 10 unidades con piedrecitas decorativas, bien con la Caja McKinder, un tablero diseñado por la profesora Jessie McKinder (de ahí su nombre) que desarrolló su docencia en Chelsea, Londres, Inglaterra, con fichas del parchís, donde las azules representan unidades, las rojas representan decenas, las verdes son centenas y las amarillas, unidades de millar.
La multiplicación:
Las Tablas de Multiplicar las trabajaremos buscando características de cada una, así como similitudes y relaciones entre las mismas, siguiendo la siguiente secuencia: 1 – 10, 2 – 4, 5 – 10, 3 – 6, 4 – 8, 3 – 9 y la del 7.
Toda
respuesta tiene que ser aceptada. Nuestras
contra-preguntas con respecto a la solución que aporta cada uno servirán para
descubrir las propiedades de la multiplicación y su relación con la suma (cada
alumno/alumna puede llegar por diferentes caminos a una misma solución), y por
tanto respetar a los demás, a su visión diferente, para corregir errores (lo
deben hacer ellos y ellas mismas), comprobando el resultado en relación a la
cuestión planteada.
